La envolvente térmica es una de las partes de un edificio más sensibles a variaciones de temperatura y humedad e influye decisivamente en el comportamiento energético de la construcción. En Placomat te contamos más sobre ella.

La envolvente térmica: funciones y propiedades

La envolvente térmica de un edificio es la parte en contacto con el exterior, lo que incluiría principalmente a fachadas y cubiertas. Actúa como la piel del edificio, siendo la zona más expuesta a fenómenos meteorológicos y variaciones térmicas, y también ayuda a la estabilidad de la construcción y a hacerla más eficiente energéticamente. Esta envolvente tiene una propiedad, el coeficiente de transmitancia térmica (U), que variará en función del número de capas que tenga y también de sus propiedades térmicas.

Dentro de la envolvente existen zonas más vulnerables, los puentes térmicos, por los que es más fácil que se produzca un traspaso de temperatura entre el exterior y el interior de la construcción, lo que genera importantes pérdidas energética. Estos puentes térmicos pueden ser huecos en el propio cerramiento (ventanas, cajas de persianas, puertas…) o zonas de cambios de materiales (cubierta-fachada, cimentación-fachada, forjado-fachada…).

Qué tener en cuenta a la hora de diseñar una buena envolvente

Para conseguir una envolvente eficaz, además de minimizar la existencia de puentes térmicos, es importante tener en cuenta varias cosas.

La primera, la zona climática donde se ubica el edificio. Esto puede influir en los espesores de aislamiento térmico necesarios para alcanzar una temperatura óptima en el interior durante todo el año. No es lo mismo un lugar con grandes contrastes térmicos entre estaciones que otra con temperaturas suaves todo el año, por ejemplo.

Por otro lado, también se ha de tener en cuenta la demanda energética que va a tener el propio edificio, determinada por el uso al que va destinado. Así podremos construir una envolvente que evite el desperdicio de energía y permita lograr un mayor ahorro en los consumos.

Por último, el aislamiento térmico es una pieza fundamental en el diseño o rehabilitación de cualquier envolvente, por lo que es esencial elegir materiales de calidad que garanticen altas prestaciones a lo largo de toda la vida útil del edificio. En Placomat sabemos mucho sobre eso, así que no dudes en contactar con nosotros para equipar tu almacén con los mejores productos de aislamiento.