El ladrillo siempre ha sido la gran estrella de la construcción de tabiques en España. De hecho, otras soluciones para crear paredes interiores, como la placa de yeso laminado, parece que no acaban de triunfar del todo en nuestro país porque muchas personas no las consideran “paredes de verdad”. Pero nada más lejos de la realidad: en Placomat queremos desmentir algunos de los mitos más extendidos sobre las paredes de cartón yeso y mostrarte todas las ventajas que tienen.
Mitos sobre las placas de yeso laminado
Muchos de los motivos que se argumentan para descartar la utilización de placa de yeso laminado (PYL) en la construcción de tabiques no son verdad. Algunos de los más conocidos son:
Mito 1: los tabiques de PYL no aíslan
Esta mala fama está causada por los tabiques mal ejecutados, a una sola placa por lado y sin su correspondiente aislamiento. Una pared de yeso laminada bien hecha tiene que llevar doble placa a cada lado y algún material aislante en su interior; de esta forma se consigue un muy buen nivel de aislamiento, en ocasiones mejor que el que proporcionan las paredes de ladrillo.
Mito 2: los tabiques de PYL no soportan peso
Esta es una verdad a medias: la PYL sí puede soportar grandes cargas (de hecho, hay placas especialmente indicadas para ello), pero los tabiques tienen que estar bien realizados (doble placa a cada lado) y se debe usar el sistema adecuado según el peso (tacos especiales para objetos ligeros y anclajes y algún refuerzo especial para muebles pesados que vayan suspendidos). Si se tienen en cuenta estas cosas previamente, no debería haber problemas.
Mito 3: los tabiques de PYL son más caros
De entrada, las placas de yeso sí cuestan más que los ladrillos, pero como su instalación es más sencilla y rápida los costes de mano de obra son mucho menores, por lo que una cosa compensa a la otra.
Ventajas de apostar por los tabiques de placa de yeso laminado
Las paredes de PYL cuentan con muchas ventajas en construcción. Algunas de las más destacadas son:
- Rapidez de instalación: como los tabiques se crean en seco (sin cementos ni enlucidos) se eliminan los tiempos de secado y se agiliza la obra. Además, las placas se atornillan a la perfilería en pocos minutos.
- Poco escombro: las placas se pueden manipular y cortar de forma fácil y los sobrantes se pueden aprovechar. Además, los residuos de PYL se pueden reciclar para volver a producir más placa de yeso.
- Acabado liso: la planitud de las placas hace que no sea necesario aplicar enlucidos; se puede pintar la pared directamente después de encintar y aplicar pasta en juntas y tornillos, con un resultado perfecto.
- Sin rozas: instalaciones, tuberías y cableados tienen que pasar por los tabiques. En las paredes de ladrillo es necesario hacer rozas para ubicarlos (algo que puede afectar negativamente a su capacidad de aislamiento), pero en las paredes de PYL no hace falta porque estas van por el hueco que queda en medio.
- Ligereza: los tabiques de PYL son ideales para reformas en las que no se puede aumentar el peso sobre el forjado, ya que son mucho más ligeros que los de ladrillo.
- Versatilidad: existen placas para todo tipo de necesidades: antihumedad, resistentes al fuego, de alta dureza, reforzadas con aislamiento… esto permite que se adapten perfectamente a los requisitos de cada espacio.
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