En la actualidad, la mejora térmica de la envolvente de los edificios es un asunto al que cada vez se le presta una mayor atención. Ya sea en nuevas construcciones o en obras de rehabilitación, el sistema de fachadas ventiladas ha ido ganando cada vez más popularidad gracias a sus enormes beneficios aislantes. Hoy en Placomat te contamos más sobre las fachadas ventiladas.
Descubre el sistema de fachadas ventiladas
Se denomina fachada ventilada a un sistema constructivo empleado para la mejora del aislamiento de la envolvente de un edificio. Se compone básicamente de tres partes, un muro de soporte (la fachada original del edificio), una capa de material aislante y el revestimiento final del edificio, que irá unido a este mediante una estructura de anclaje (generalmente compuesta por perfiles de aluminio).
La peculiaridad de este sistema, y que lo diferencia de otros similares como el SATE, es que se deja un vacío entre aislante y revestimiento, un espacio a través del que se produce una ventilación natural propiciada por el “efecto chimenea” (el aire circula continuamente de abajo hacia arriba). De hecho, la ventilación es un factor fundamental cuando hablamos de aislamiento térmico, puesto que si no se le presta la debida atención podemos acabar con un edificio hermético, donde el calor o el frío se acumulen o donde aparezcan problemas de humedad, condensación o exceso de CO2. Las fachadas ventiladas impiden la aparición de estos problemas, además de conseguir un ahorro energético de hasta el 70% respecto a las condiciones iniciales de la construcción donde se instalen.
Ventajas de las fachadas ventiladas
La instalación de una fachada ventilada sobre un edificio no es económica, pero sus grandes ventajas hacen que se recupere la inversión muy pronto y por lo tanto resulte muy rentable apostar por ella. Algunos de esos beneficios son:
- Aislamiento térmico: la combinación de los materiales aislantes junto con la ventilación que proporciona este sistema constructivo hacen que el interior del edificio conserve una temperatura natural y confortable durante todo el año.
- Aislamiento acústico: los aislantes empleados y la capa de aire que se genera entre ellos y el revestimiento son un combo perfecto para amortiguar las molestias generadas por ruidos procedentes del exterior.
- Humedades. El vapor generado desde el interior del edificio es evacuado sin problemas gracias a la zona ventilada, lo que reduce todo tipo de problemas de humedad, condensación, mohos…
- Duración y resistencia. Una fachada ventilada apenas requiere mantenimiento, y los materiales de su revestimiento (que pueden ser cerámica, metal, materiales compuestos, piedra, hormigón…) son muy resistentes a los agentes meteorológicos.
- Estética. El sistema de fachadas ventiladas modifica por completo la apariencia exterior de los edificios, lo que puede suponer una excelente oportunidad de situarlos a la vanguardia en cuestión de diseño.
Las fachadas ventiladas son uno de los sistemas de aislamiento más eficaces en la actualidad y cada vez son más los arquitectos, ingenieros y empresas de la construcción que apuestan por ellas. Recuerda que en Placomat disponemos de los mejores materiales para la instalación de sistemas de fachada ventilada, de primeras marcas y con la máxima calidad garantizada. ¡Pregúntanos!
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